Los personajes femeninos se han ganado un espacio fundamental en las páginas de cómics de las dos más grandes compañías. Muchas de ellas son experimentadas peleadoras o brillantes criminales que destruirían a cualquier oponente en meros segundos, y es por eso que decidimos hacer un ranking de las 10 mujeres más peligrosas del cómic en DC y Marvel. 

Laura Kenney (X-23/Wolverine)

Conocida inicialmente como X-23. Laura fue creada como un clon de Logan, pero su creadora decidió dejarla libre ante las atrocidades de su entrenamiento de asesina. Tras ser liberada al mundo se unirá a los X-men, y particularmente al equipo secreto de X-Force, el cual se encargará de las misiones más oscuras y violentas que los X-Men no pueden tomar. Pocos personajes del Universo Marvel tienen tanta sangre en sus garras como Laura, pero por eso mismo es «la mejor que hay en lo que hace».

Cassandra Cain (Black Bat)

Hija de los asesinos David Cain y Lady Shiva, Cassie fue entrenada en aislamiento y sin aprender a hablar con el objetivo de que el único lenguaje que hablara fuera el de la violencia. Esto derivó en que se convirtiera en una experta en lenguaje corporal, lo que le permite anticipar los movimientos de su oponente en una pelea. Si bien decidió negar el legado criminal de sus padres y unirse a la familia del murciélago, esto no la hace menos mortal. Cassie es y será el arma secreta de la familia, ya que su inmensa habilidad marcial es inigualable y no hay enemigo que pueda hacerle competencia.

Black Widow (Natasha Romanoff)

Natasha fue entrenada desde pequeña para ser el arma perfecta. Entre sus instructores encontramos a Winter Soldier (Bucky Barnes) y Wolverine (Logan), por lo que es de asumir que tuvo la mejor educación que un peleador podría pedir. Natasha cuenta con el paquete completo: asesina de efectividad absoluta, super espía e impactante belleza, por lo que no hay enemigo que se resista a sus encantos o aguante sus fuertes golpes. No por nada es miembro reconocido de los Avengers, en donde se codea con dioses y genios.